viernes, 6 de julio de 2012

Uno de los nuestros

Henry Hill, hijo de padre irlandés y madre siciliana, vive en Brooklyn y se siente fascinado por la vida que llevan los gángsters de su barrio, donde la mayoría de los vecinos son inmigrantes. Paul Cicero, el patriarca de la familia Pauline, es el protector del barrio. A los trece años, Henry, decide abandonar la escuela y entrar a formar parte de la organización mafiosa como chico de los recados; pero muy pronto se gana la confianza de sus jefes, gracias a lo cual irá subiendo de categoría.

Para mí "El padrino" representa la cumbre de las películas de gangsters. En ella se utiliza el marco de la mafia para narrar una espectacular tragedia griega, colosal, épica, que se ha hecho un hueco imborrable en mi memoria. No creo que "El padrino" sea la principal influencia de "Uno de los nuestros", pero siempre que veo esta última tengo la sensación de que se trata de una revisión de aquella, despojándola de toda historia y haciendo todo un recorrido por los entresijos de la mafia. Y el resultado es monumental.

Dejando de lado las cuestiones morales, Scorsese utiliza ese estilo poderoso, atractivo, fascinante para bucear por el reverso y el anverso de un imperio basado en el poder que tristemente ofrece la sangre, en lujos y derroches que se sustentan en incumplir unas cuantas leyes; en definitiva, en vivir de puta madre a costa de que otros no vivan tan bien.

Para esta guía, Scorsese coge como conejillo de indias a uno de los integrantes, un perfecto Ray Liotta, y a través de él nos muestra todas las vivencias en este submundo, y todo lo que esto comporta. Para meternos en la historia, se emplea una espléndida banda sonora, un apabullante montaje con la precisión de un reloj suizo, y, sobre todo, la fuerza del retrato de estos cabrones, sobre todo de De Niro y Joe Pesci, que tan pronto se nos hacen simpáticos como se vuelven aborrecibles.

No hay preocupación por describir personajes, algunos por sus miradas lo dicen todo (absolutamente genial la escena de De Niro sentenciando a un pobre diablo con una mirada y unas caladas, y de fondo “Sunshine of Your Love”). Barroca, excesiva, minuciosa, larga, trepidante, genial, por completo imprescindible.


1990
DIRECTOR Martin Scorsese
GUIÓN Nicholas Pileggi, Martin Scorsese (Novela: Nicholas Pileggi)
MÚSICA Varios
FOTOGRAFÍA Michael Ballhaus
REPARTO Robert De Niro, Ray Liotta, Joe Pesci, Lorraine Bracco, Samuel L. Jackson, Paul Sorvino,Debi Mazar, Mike Starr, Tony Darrow, Frank Sivero, Frank Vincent, Chuck Low, Frank DiLeo,Clem Caserta, Illeana Douglas, Melissa Prophet, Michael Imperioli, Tobin Bell, Billy L. Sullivan
PREMIOS
1990: Oscar: Mejor actor secundario (Joe Pesci). 6 nominaciones
1990: BAFTA: Mejor película
1990: Festival de Venecia: León de Plata (Mejor director)
1990: Círculo de Críticos de Nueva York: Mejor película


Dedicato a Marian Chouciño, un amico di famiglia

jueves, 5 de julio de 2012

El exótico hotel Marigold

Un grupo de ancianos ingleses deciden disfrutar de su jubilación en Bangalore, una exótica población de la India, pero las diferencias culturales pronto se pondrán de manifiesto creándoles todo tipo de problemas.
Muchos de quienes vivieron una experiencia cercana a la muerte describen ese estado como un recorrido a través de un túnel de luz, al final del cual personas amigas te reciben y
acogen. La película de John Madden provoca esa impresión en mi mente. Un grupo de personas mayores, desencantadas de un modo u otro por la forma en que transcurren sus vidas en un país de los llamados primermundistas (Inglaterra), y asustadas ante las perspectivas que les ofrece el sistema (una cutre jubilación sin sorpresas, a la espera de la muerte verdadera), se lían la manta a la cabeza y deciden lanzarse a la aventura de sus vidas en un país exótico (eso sí, un país que fue su colonia y que, por lo tanto, habla inglés). Pero el espíritu de la película se puede extrapolar, salvando las necesarias distancias. Volviendo a lo del túnel de luz, explico por qué la atmósfera de esta película trajo a mi mente tal simil: ese grupo de británicos “casi viejos”, muchos convencidos ya de su inutilidad para el mundo, se ven envueltos en la brillante luz y la explosión de vida de ese país que es India. Y a pesar de las diferencias culturales que provocan en ellos el inevitable shock, conforme avanza la película vemos que el balance va resultando positivo, que al arriesgarse eligiendo como destino final de sus vidas un lugar tan alejado de sus respectivas circunstancias vitales no han fallado, y que de un modo u otro van a cambiar su decepción inicial por un sentido de la propia valía, una especie de rejuvenecimiento interior, y una renovación de sus deseos de seguir viviendo o, al menos, de terminar bien lo que llevaba camino de ser una catástrofe.
Esta es una película que mezcla veteranía con juventud, que opone luz a la oscuridad que en el inconsciente colectivo provoca la idea de envejecimiento, que hace sentir optimismo ante la posibilidad de nuevos retos, nuevas fronteras que, si se desea, pueden seguir existiendo para las personas cuya edad se cuenta por varias decenas, siempre que estén despiertas y dispuestas a seguir dando lucha.
Viene bien que se escriba este tipo de cine optimisma y divertido para “mayores”, porque nunca como hoy se ha vivido tantos años, el número de “mayores” es tan enorme, y sin embargo nunca, como hasta ahora, se ha temido tanto llegar a mayor. En el pasado los veteranos eran personas respetadas, pero hoy, quien llega a tan solo 60 es considerado, en general, un carcamal, y por mucho que se sepa que aún vivirá otros 30 o más años, se le considera un marginado de la sociedad, y solo cuentan para él o ella los viajes del Imserso. Pero hay otro mundo. Y los veteranos, por ser mayoría, tienen que convencerse de que tienen derecho a él, reclamarlo y disfrutarlo.
Me quedo con una frase que se repite en la película y que me parece tremendamente positiva: “las cosas al final siempre terminan bien, y si no terminan bien es que no es el final”. Maravillosa.

 2011
DIRECTOR  John Madden
GUIÓN  Ol Parker (Libro: Deborah Moggach)
MUSICA Thomas Newman
FOTOGRAFÍA Ben Davis
REPARTO Judi Dench, Bill Nighy, Maggie Smith, Tom Wilkinson, Celia Imrie, Ronald Pickup, Penelope Wilton, Dev Patel, Tena Desae


viernes, 16 de marzo de 2012

Intocable

Como resultado de un accidente de parapente que le ha dejado tetrapléjico, Philippe, un rico aristócrata, contrata como cuidador a domicilio a Driss, un inmigrante de un barrio marginal recién salido de la cárcel. En una palabra, la persona menos indicada para el puesto. No obstante, entre los dos, acaban logrando que convivan Vivaldi y Earth Wind and Fire, la elocuencia y la hilaridad, los trajes de etiqueta y las medias del chándal. Dos mundos enfrentados que, poco a poco, congenian hasta forjar una amistad tan disparatada, divertida y sólida como inesperada, una relación única en su especie de la que salen chispas transformándoles en... "Intocables".
El argumento está basado en una historia real que los directores vieron en un documental en el año 2004. Fue en Francia un extraordinario éxito de público, estando 10 semanas consecutivas como nº1 de taquilla, con más de 18 millones de espectadores. Como resultado es uno de los films más taquilleros de la historia de Francia.
El ritmo de gracias o chistes no decae en casi ningún momento de la película, ni en cantidad, ni, por supuesto, en calidad. Aunque no hay que olvidar el lado más dramático de la película, también muy bien conseguido, que acompaña al lado humorístico complementándose en todo momento.
Es decir, las dos vertientes van siempre de la mano y en cada momento humorístico palpamos el dramatismo, y viceversa.
Es de elogiar tanto el gran trabajo de Omar Sy como el de François Cluzet, que interpretando a personajes con tanta personalidad, es fácil caer en las individualidades y que cada uno actúe centrado en sí mismo. Pero en cambio, lo que vemos es a dos actores que, genuinamente, congenian a la perfección creando un realismo que se hace agradecer.
En particular, Omar Sy clava cada expresión facial y François Cluzet más que interpretar las escenas, las vive y experimenta.
Hablamos de una película con escenas de gran calibre; algunas de ellas sutiles, como las imágenes del extrarradio de donde procede Driss, donde un simple plano es suficiente para reflejar el contraste entre el lujo y los suburbios; y otras (como la escena del baile de Eart,Wind&Fire, no voy a desvelar nada más) donde la dicción de la elegancia con la jerga callejera queda muy bien implícita dentro de la escena.

En resolución, una gran película que nos habla de la amistad. Pero de una amistad demencial de dos polos opuestos que gracias a su energía, comicidad y complicidad los hace intocables.

2011: Premios Cesar: Mejor actor (Omar Sy). 9 nominaciones, incluyendo mejor película
2011: Festival de San Sebastián: Sección oficial no competitiva - Clausura
2011: Festival de Tokyo: Mejor película, mejor actor (François Cluzet & Omar Sy)DIRECTOR  Olivier Nakache, Eric Toledano
GUIÓN  Olivier Nakache, Eric Toledano
MÚSICA  Ludovico Einaudi
FOTOGRAFÍA  Mathieu Vadepied 

domingo, 29 de enero de 2012

Baarìa - La porta del vento 2009

"Baarìa" es un relato épico que abarca tres generaciones, desde la década de 1930 hasta los tiempos modernos, usando como telón de fondo el surgimiento del fascismo, la Segunda Guerra Mundial y los manejos políticos de la Italia de posguerra. Con un presupuesto de 25 millones de euros (35,5 millones de dólares), fue la película de apertura del Festival de Venecia. Seleccionada por Italia como candidada al Oscar 2010 en la categoría de película de habla no inglesa.

Tornatore vuelve una vez más a su juventud en Sicilia y filma un mosaico barroco, tierno, rudo, romántico, bullanguero, supersticioso, esperanzado, desilusionado, pleno de hambres y vendettas, luchas y griterío, maldiciones, juramentos, insultos, burlas, gente que se quiere o se odia a su ruidosa manera, niños contestones y rapazuelos de ojos colmados de sed, mayores agobiados de problemas, carencias y golpes de una suerte demasiado adversa. El pulso de Bagheria desde el ascenso del fascismo hasta la actualidad es el latido de toda una isla dotada de unas señas de identidad que ya conocemos gracias a obras como “El gatopardo” de Lampedusa, o la gran ópera prima de Tornatore, “Cinema Paradiso”.
El devenir de Peppino Torrenuova y los suyos compone una red profusa de situaciones por las que Italia atravesó durante gran parte de un siglo veinte convulso. Tan nostálgico como irónico, y sobre todo retratista del carácter de un pueblo singular, del que ha sabido exprimir (aunque quizás con excesiva aceleración y confusión) sus rasgos chocantemente y escandalosamente humanos, Tornatore evoca las hambrunas, los campesinos apaleados, los niños que maduraban prematuramente con los trancazos de la pobreza, la mafia opresora, los fascistas que no consiguieron lavar el cerebro del todo a unos aldeanos analfabetos y resabiados, las costumbres locales, las supercherías, las tradiciones recalcitrantes, el abrazo del comunismo al que se agarraron muchos sicilianos aunque no fuera nada más porque estaban hartos de la mafia y de los caciques y políticos corruptos.
Los ciclos vitales giraban en Baarìa, o Bagheria, igual que siempre y que en todas partes, nacimiento, infancia, juventud, amor, tragedia, inquietudes por un futuro en el que todos aspiramos a encontrar algún jirón de felicidad, pillos traviesos jugando en las calles y robando frutas en los campos de los terratenientes, vendedores pregonando, mujeres de luto, jóvenes casaderos heridos por los dardos de la pasión, viejos reunidos en las cantinas, guerras, pérdidas, ausencias, migraciones, mítines políticos en las plazas, gritos, discusiones, risas, bromas, provocaciones y llantos, el fuerte viento arrastrando el polvo, las piedras antiguas de los monumentos esculpidas con resistente belleza, las humildes viviendas.
Y entre tanto ruido sólo los ojos hablan en silencio, los de Peppino y los de Mannina, los de Michele, Angela y Pietro, los de Ninno, Cicco y la nonna.
Son en realidad esos dos pequeños espejos redondos los que más cosas dicen, cuando la verborrea no alcanza a expresar pensamientos impronunciables, emociones que sólo se entienden en un brevísimo intercambio de miradas compartido como un secreto de los de guardar bajo llave.
Tal vez no hay diferencia entre soñar la vida y vivir un sueño.
Cuando uno crece se da cuenta de algo: que los tesoros ocultos de las leyendas no están ahí para ser encontrados, sino para ser buscados.

2009
Nominada al Globo de Oro: Mejor película de habla no inglesa
Premios David di Donatello: David de la Juventud y mejor música
Festival de Veneci: Sección oficial largometrajes a concurso

Director Giuseppe Tornatore
Guión Giuseppe Tornatore
Música Ennio Morricone
Fotografía Enrico Lucidi

The Help - Criadas y señoras 2011

Mississippi, años 60. Skeeter (Emma Stone) es una joven sureña que regresa de la universidad decidida a convertirse en escritora. Su llegada altera la vida de la ciudad e incluso la de sus amigos porque se ha propuesto entrevistar a las mujeres negras que se han pasado la vida al servicio de las grandes familias sufriendo todas las formas de discriminación racial.
"La película no es perfecta: en ocasiones muestra sus costuras. Pero en su mayor parte es un conmovedor homenaje a las mujeres subyugadas que mantienen la cabeza alta"         
Viola Davis es una fuerza de la naturaleza y Octavia Spencer tiene un rostro maravillosamente expresivo y un impecable tempo cómico
Los fans de la novela pueden respirar tranquilos: el cálido encanto del libro se ha convertido en una película igualmente emotiva.




2011: Oscars: 4 nominaciones, incluyendo Mejor película y actriz principal (Viola Davis)
2011: Globos de Oro: Mejor actriz de reparto (Octavia Spencer). 5 nominaciones
2011: Premios BAFTA: 5 nominaciones, incluyendo Mejor película
2011: National Board of Review: Mejor reparto
2011: Critics Choice Awards: 3 premios de interpretación. 8 nominaciones
2011: Círculo de críticos de Nueva York: Mejor actriz de reparto (Jessica Chastain)
2011: Satellite Awards: Mejor actriz (Davis). 4 nominaciones, incluyendo mejor director
2011: Asociación de Críticos de Los Angeles: Mejor actriz secundaria (Jessica Chastain)

Director Tate Taylor
Guión Tate Taylor ( Novela de Kathryn Stockett )
Música Thomas Newman
Fotografía Stephen Goldblatt